martes, 24 de agosto de 2010

SAN FRANCISCO: DISTRITO FINANCIERO Y BARRIO ITALIANO

Aun con las pesadillas de la lavadora recientes volvemos a pegarnos el madrugón de la vida para irnos de Las vegas. Cargamos a muerte la furgoneta de alquiler con todos los maletones y a las 6:00 A.M salimos del hotel buscando la terminal de coches de alquiler.


Dejamos el coche y cogemos el transporte al aeropuerto. Todo bien y llegamos con tiempo. Vuelo tranquilo y, en hora y media llegamos a destino. Aterrizamos algo más tarde porque el piloto se dedica a dar varias vueltas esquivando las nubes bajas (vivir juntos, morir solos….).

Aterrizamos finalmente y nos encontramos con la notable bajada de temperaturas. Impresionante el cambio desde Las Vegas. Rápidamente chaquetas y pañuelos por encima.

Cogemos el Shuttle al hotel y flipamos con la conversación del driver, que es latino y se pasa todo el viaje hablando con un compatriota sobre como entablillarse un dedo con el palo de un polo de hielo. Nos deja en nuestro hotel en la calle Lombard. Aspecto de motel de carretera en la ciudad regentado por un matrimonio de abuelos que no tienen desperdicio. En el vuelo fantaseamos con el desayuno del hotel que lo tenemos incluido y…nuestro gozo en un poza al ver en aquella recepción una cafetera y poco más. Nos explica que hay que bajar por la mañana a coger el café, zumo de brik y un bollo y a desayunar en la habita!!! Nada de buffete!!! Con lo que pagamos no se tampoco que esperábamos!



Dejamos los trastos y empezamos a patear San Francisco. Comenzamos a bajar y a subir cuestas…aquí las cuadras están en pendiente!!!! No se porque no hacen un plano en relieve y así te haces una idea de lo que te espera!!!

Encontramos un restaurante de burguers, ensaladas etc….. comemos a riesgo de ser detenidos porque Elen involuntariamente se roba una lata de coca-cola (y en este país lo de los robos se lo toman muy en serio….).
Con el estomago lleno empezamos a patear San Francisco y sus cuestas. La primera impresión es muy buena, mucho encanto las carreteras con los raíles del tranvía.





Decidimos ir a ver el distrito financiero pasando por el Barrio chino. Nos gusta mucho (mucho más que el de New York). No se trata de simples bazares con imitaciones sino que son tiendas en las que se venden muchos productos chinos. Incluso el olor no tiene nada que ver. Entramos en un montón de tiendas mientras vamos camino al distrito financiero, o la parte más céntrica de la ciudad. Nos damos cuenta que hemos llegado en cuanto aparecen tiendas de marcas conocidas. En un momento nos dispersamos para nuestros intereses individuales, volviéndonos a juntar al rato.



Continuamos visitando el centro y vemos las colas para coger el tranvía por la mítica cuesta. Ana y yo hacemos una incursión en Macys en busca de unos zapatos Calvin Klein que vimos en L.A. Nuestro gozo en un pozo ya que no encontramos el modelo….seguiremos buscando.



Casi por el frio que estamos pasando (hay que joderse….) nos vemos obligados a tomar un café en un Macdonals. Aquí nos informan del horario de cierre de muchos restaurantes y decidimos ir a cenar pronto no sea que nos quedemos sin sitio donde ir. Mientras lo decidimos, Tere va al baño y sale escopetada tras hacer el ridiculo padre. Resulta que al salir se choca con una pedazo de negra en silla de ruedas y del desequilibrio se queda sentada en su regazo. Casi ni tiempo de terminar el café..... salimos todos del Macdonals para evitar encontrarse con la mujer.

Volvemos a pasar por el barrio chino y nos damos de frente con el barrio Italiano. Con mucho ambiente. En la guía nos recomiendan 2 sitios pero están petados. Nos metemos entre calles y entramos en un restaurante pequeñito atendido por auténticos italianos. Nos pedimos un plato cada uno con la mala suerte que nos toca el camarero en pardi (más preocupado por atusar su tupé que por hacer bien su trabajo). Nos traen los platos con unas raciones minúsculas que nos dejan con ganas de más y encima al camarero se le olvida el plato de Tere. Una vez cenados todos (ante el hambre no hay compañerismo) Tere reclama su plato al jefe. Finalmente llega con los mil perdones del jefe y del camarero pardi, diciéndonos que ese plato va por cortesía de la casa. En fin…. Lo de la cortesía no debe ser lo mismo en Italia o nosotros entendimos mal porque en la cuenta bien claro nos aparece el precio. Como tontos que somos pagamos pero no dejamos propina!!!!! Que malos que somos!!!!

Menuda ostia que nos dan en el italiano. El sitio donde más caro hemos comido (y no el mejor desde luego). Y así, con la mala leche y el aire frio azotándonos en la cara comenzamos el ascenso hasta la calle Lombart (la nuestra) pasando por la turística (por lo peculiar) zona de la misma calle donde los coches bajan por la carretera haciendo Zigzag. Una vez visto…bajamos al número 1650 (el de nuestro hotel) a meternos bajo esos edredones típicos de la más intensa telenovela Venezolana!!.

1 comentario:

  1. Esa Monic¡¡¡¡¡¡¡ Pero que guapa sales en las fotos cuñaaaa, que envidia, da igual lo que te pongas que siempre sales divina¡¡¡. Ya te oigo reir....jejejej
    Esa gente de Eibar¡¡¡, que por segunda vez le deja a la chini con las cazadoras en la mano¡¡¡, Pero que se han creido los chinos, será que os han visto cara de guiris o de pardillos.....o de gente pudiente.... nunca se sabe. ;))))))
    Falta la foto de la puesta de sol del Gran Cañón, ya me haceis ir a mi a sacarla... me cagüen...
    Bueno chic@s, que como lo bueno se acaba pronto, pues, que disfruteis lo poco que os queda y que la vuelta no sea tan dura. Siempre os quedará el BLOG. Saludos.

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